El otro día anoté una cosa. Lo hago a menudo cuando estoy en la carretera. Más o menos venía a decir lo siguiente: "Los viejos sueños eran buenos sueños. No se realizaron pero me alegro de haberlos tenido." No sé muy bien qué significa pero pensé que podría utilizarlo un día.
"FRANK - ¿Y nosotros?
FRANCESCA- Supongo que sabes en tu fuero interno que en cuanto nos fuéramos de aquí todo cambiaría.
FRANK- Podría mejorar.
FRANCESCA- Por otro lado, no importa la distancia que pongamos entre nosotros y esta casa, yo siempre la llevaré dentro de mí. Lamentaré cada momento que pasemos juntos por lo mucho que duele. Y entonces, incluso estos cuatro maravillosos días sólo me parecerán algo sórdido y una equivocación.
FRANK- Francesca, ¿ crees que lo que nos ha pasado le pasa a cualquiera, lo que sentimos el uno por el otro?. Ahora podría decirse que ya no somos dos personas, si no una sola, y ... algunas personas se pasan la vida buscando eso sin encontrarlo, y otras ni siquiera creen que exista. ¿Vas a decirme que lo que vamos a hacer es lo correcto? ¿ Vamos a perderlo?.
FRANCESCA- Somos aquello que hemos elegido. No lo entiendes. No lo ves. Nadie entiende que cuando una mujer toma la decisión de casarse y de tener hijos, en cierto aspecto su vida comienza pero en otro se detiene. Construyes una vida de detalles y te detienes, te mantienes firme para que tus hijos puedan seguir adelante. Y cuando se van, se llevan tu vida llena de detalles con ellos. Se espera que entonces tú sigas adelante, pero ya no recuerdas lo que te inspiraba a ir hacia adelante, porque hace mucho que nadie te lo pregunta, ni siquiera tú misma. Pero nunca piensas que vayas a vivir un amor como el que nosotros hemos vivido.
FRANK- ¿ Y ahora que lo tienes?
FRANCESCA- Ahora quiero guardarlo para siempre. Quiero amarte como te amo ahora durante el resto de mi vida. Pero si nos vamos lo perderemos. Yo no puedo hacer que desaparezca toda una vida para comenzar otra vida. Lo único que puedo hacer es guardar lo nuestro en alguna parte dentro de mí. Y tú tienes que ayudarme.
FRANK- No nos pierdas. No nos sacrifiques inútilmente. Tal vez te sientas así o tal vez no. Quizá sea porque estás en esta casa, pero cuando vengan, te sientas de otro modo. ¿ No lo crees posible?
FRANCESCA - No lo sé.
FRANK- Voy a quedarme unos días más por aquí. Podemos hablarlo en otro momento. No hace falta que lo decidas ahora.
FRANCESCA- Frank, no hagas eso
FRANK- No quiero despedirme en este momento. No hace falta tomar esta decisión ahora. Quizá cambies de idea.
FRANCESCA- Yo no podré....
FRANK - Sólo lo diré una vez. No lo había dicho nunca. Pero esta clase de certeza solamente se presenta una vez en la vida. "
FRANCESCA- Supongo que sabes en tu fuero interno que en cuanto nos fuéramos de aquí todo cambiaría.
FRANK- Podría mejorar.
FRANCESCA- Por otro lado, no importa la distancia que pongamos entre nosotros y esta casa, yo siempre la llevaré dentro de mí. Lamentaré cada momento que pasemos juntos por lo mucho que duele. Y entonces, incluso estos cuatro maravillosos días sólo me parecerán algo sórdido y una equivocación.
FRANK- Francesca, ¿ crees que lo que nos ha pasado le pasa a cualquiera, lo que sentimos el uno por el otro?. Ahora podría decirse que ya no somos dos personas, si no una sola, y ... algunas personas se pasan la vida buscando eso sin encontrarlo, y otras ni siquiera creen que exista. ¿Vas a decirme que lo que vamos a hacer es lo correcto? ¿ Vamos a perderlo?.
FRANCESCA- Somos aquello que hemos elegido. No lo entiendes. No lo ves. Nadie entiende que cuando una mujer toma la decisión de casarse y de tener hijos, en cierto aspecto su vida comienza pero en otro se detiene. Construyes una vida de detalles y te detienes, te mantienes firme para que tus hijos puedan seguir adelante. Y cuando se van, se llevan tu vida llena de detalles con ellos. Se espera que entonces tú sigas adelante, pero ya no recuerdas lo que te inspiraba a ir hacia adelante, porque hace mucho que nadie te lo pregunta, ni siquiera tú misma. Pero nunca piensas que vayas a vivir un amor como el que nosotros hemos vivido.
FRANK- ¿ Y ahora que lo tienes?
FRANCESCA- Ahora quiero guardarlo para siempre. Quiero amarte como te amo ahora durante el resto de mi vida. Pero si nos vamos lo perderemos. Yo no puedo hacer que desaparezca toda una vida para comenzar otra vida. Lo único que puedo hacer es guardar lo nuestro en alguna parte dentro de mí. Y tú tienes que ayudarme.
FRANK- No nos pierdas. No nos sacrifiques inútilmente. Tal vez te sientas así o tal vez no. Quizá sea porque estás en esta casa, pero cuando vengan, te sientas de otro modo. ¿ No lo crees posible?
FRANCESCA - No lo sé.
FRANK- Voy a quedarme unos días más por aquí. Podemos hablarlo en otro momento. No hace falta que lo decidas ahora.
FRANCESCA- Frank, no hagas eso
FRANK- No quiero despedirme en este momento. No hace falta tomar esta decisión ahora. Quizá cambies de idea.
FRANCESCA- Yo no podré....
FRANK - Sólo lo diré una vez. No lo había dicho nunca. Pero esta clase de certeza solamente se presenta una vez en la vida. "